El
tratamiento de la luz en el arte es uno de los temas más
importantes de las técnicas artísticas (claroscuro, perspectiva aérea,
profundidad); desde el momento en el que la luz es la fuente que nos posibilita
la visión de las cosas, se convierte en el elemento principal a tener en cuenta
en cualquier obra de arte. Desde los primeros artistas, hasta los más actuales,
siempre ha existido la preocupación por el tema de la luz.
La técnica más utilizada en el arte bidimensional:
Claroscuro: Técnica en que se basa en
la distribución de los valores tonales en la organización de una obra de arte,
donde se diferencia la luz de la sombra, utilizando valores altos y bajos.
En
pintura, la luz es un objeto especial, cuya aparición en el cuadro es precisamente
la que permite la visión del contorno, la textura y
el color de los objetos y su ubicación en el espacio, con
distintas convenciones en cada uno de los estilos y técnicas
pictóricas asociadas (sombreado, sfumato, claroscuro,
tenebrismo, impresionismo). La utilización de distintos tipos de focos de
luz (internos, externos, inferiores, laterales, luz
reflejada, luz natural, luz artificial, luz filtrada, etc.) permite
hablar de distintos tipos de iluminación, e incluso de la especulación
sobre la vibración de esa luz.
Volumen: Elemento que incide en los
objetos que vemos de forma diferente a la frontal, también influyen factores
como la intensidad de la luz, la dirección o la fuente de donde proviene.
Existen
diversas técnicas para representar efectos del mismo en la bidimensional, como
el claroscuro, el modulado, el modelado y la perspectiva aérea.
En el
siglo XIX podemos encontrar dos movimientos en los cuales la luz es la
protagonista de sus obras, pero la forma de implementarla es muy diferente.
REALISMO VS IMPRESIONISMO:
REALISMO:
Realismo es la denominación de
un estilo o movimiento pictórico que se dio en Francia a
mediados del siglo XIX, su principal representantes Gustave Courbet.
El taller del pintor,
Gustave Courbet, cuadro de 1855 que dio origen a la definición del
movimiento
CARACTERÍSTICAS:
Refleja
la realidad cotidiana
Los
artistas dejan a un lado los temas sobrenaturales, mágicos, y se centran
en temas más corrientes.
Reproducen
imágenes al natural.
Es
una pintura objetiva, que no intenta embellecer la realidad.
Representa
la vida cotidiana, en el campo, en la ciudad, el paisaje, el trabajo.
No
busca la belleza en su arte.
OBJETIVO: Es la representación
objetiva y verosímil de la realidad.
PARTICULARIDADES RESPECTO A LA UTILIZACIÓN DE LA LUZ:
Estudia
los efectos de la luz y de los fenómenos atmosféricos sobre las escenas
representadas, dándole a sus obras gran naturalidad. Se interesaron por los
cambios atmosféricos, filtraciones de luz y los cambios que producen.
Con
respecto a la técnica pictórica, podemos decir que hacen un gran uso del
claroscuro, dándole a sus obras un gran efecto de volumen y naturalidad.
Recordemos que dicha técnica es una de las más utilizadas en la historia de la
pintura.
La luz ha
sido una de las grandes protagonistas en este movimiento. Aquí los artistas son
capaces de transmitir emociones, de dramatizar las escenas, de conferir
credibilidad a lo pintado, de crear ilusiones.
OBRAS:
Gustave
Courbet. Retrato: "El desesperado" 1841.
Jules
Breton "La retirada de las espigadoras" 1859.
Jean
.F. Millet. "Las espigadoras" 1857.
IMPRESIONISMO:
El Impresionismo es
la denominación de un movimiento artístico, definido inicialmente para la
pintura impresionista .Surge en el siglo XIX en Europa, principalmente en
Francia, con el intento de plasmar la luz, y el instante, sin reparar en la
identidad de aquello que lo proyectaba, es decir, formas con identidad.
Los
impresionistas se preocupaban más por captar la incidencia de la luz sobre el
objeto que por la exacta representación de la forma.
PARTICULARIDADES
CON RESPECTO A LA UTILIZACIÓN DE LA LUZ:
Artistas impresionistas y sus trabajos:
Los artistas
impresionistas pintaban principalmente sus trabajos en el exterior en lugar de
en los estudios, usando temas como paisajes, agua reflejando la luz del sol y
personas disfrutando actividades recreativas en el exterior. Pinceladas rápidas
y cortas y colores primarios sin mezclar se usaban para simular el reflejo, la
luz y el movimiento. Elementos característicos que aparece en todas sus obras:
la luz. Esa luz que tiende a difuminar los contornos y refleja los
colores de los objetos circundantes en las zonas de penumbra. . Estudiaban los
distintos matices de la atmósfera mediante versiones de un mismo motivo en
distintos momentos del día, variando la luz y la atmósfera.
Coloración
de las sombras: Evitaban las sombras negras y se reducían a espacios coloreados
con tonalidades complementarias —luces amarillas, sombras violetas—. El
claroscuro quedó eliminado.
Técnica: A
partir del uso de colores puros o saturados, los artistas dieron lugar a la ley
del contraste cromático, es decir: «todo color es relativo a los colores
que le rodean», y los complementarios enriqueciendo el uso de
colores puros bajo contrastes, generalmente de fríos y cálidos. Las sombras
pasaron de estar compuestas por colores oscuros a estar compuestas por colores
complementarios que, a la vez, creaban ilusión de profundidad. La
característica principal es el uso de complementarios, de la luz a la sombra y
en un mismo valor, esto se denomina modulado del color.
Podemos decir que, rompiendo con la dinámica clásica del claroscuro, donde
el contraste se da por valor, esto se denomina modelado del color; el contraste
entre claridad y oscuridad es la que generan la ilusión de profundidad.
Asimismo enriquecieron el lenguaje plástico separando los recursos propios del
dibujo y aplicando únicamente los recursos propios de la pintura: es decir, el
color.
OBRAS:
Claude
Monet"Impression, soleil levant" 1872.
Claude
Monet "Las amapolas" 1873.
Claude Monet“Los nenúfares blancos”1899.
Oscar-Claude Monet Es el principal exponente del impresionismo.(París, 14 de
noviembre de 1840-Giverny, 5 de diciembre de 1926)
Sus
primeras obras, hasta la mitad de la década de 1860, son de
estilo realista. Monet logró exponer algunas en el Salón de París. A
partir del final de la década de 1860 comenzó a pintar obras
impresionistas.
En 1890,
Monet desarrolló el concepto de las «series», en las que un
motivo es pintado repetidas veces con distinta iluminación. Al mismo tiempo
comenzó a trabajar en el famoso jardín de su casa en Giverny con
estanques de nenúfares que luego utilizó como motivo para sus pinturas.
El
método elegido para trabajar es el aire libre y se dedicó al estudio de las
transparencias y los efectos lumínicos del agua, y la atmósfera.
El aire
libre y la luz inundan la obra de Monet. Expresa sensaciones de la brisa que
hacen ondular las hierbas, estremece las hojas, traduce la luz, sus cambios y
sus reflejos, y busca los fenómenos atmosféricos.
"Cuanto
más viejo me hago más cuenta me doy de que hay que trabajar mucho para
reproducir lo que busco: lo instantáneo. La influencia de la atmósfera sobre
las cosas y la luz esparcida por todas partes"
Claude
Monet, 1891
Una serie
de gran importancia realizada por el artista son los Almiares:
Almiares es una serie de pinturas de Claude
Monet. Los sujetos de todos cuadros son almiares en campos después de la
cosecha. El título refiere principalmente a una serie de veinticinco cuadros
pintados entre el fin del verano de 1890 y la primavera después. La serie es
conocida por su uso temático de repetición para mostrar diferencias en la
percepción de luz durante distintos momentos del día, estaciones y tipos de
tiempo. Fueron pintados en campos cerca del hogar de Monet
en Giverny, Francia.
Pero en
realidad lo que persigue no es tanto la forma de cada uno de esos almiares sino
la luz, esa luz que transforma todo; que se percibe de diferente manera a
medida que transcurre el día, desde la primera luz del
alba hasta la última luz del atardecer; en
las estaciones del año y con el clima característico.
Esa luz que cubre de un color diferente a los almiares y
envuelve a cada uno de ellos de un halo personal.
“Para mí
el paisaje apenas existe como tal paisaje -ya que su aparición está
en constante cambio- sino que vive en virtud de su entorno, el aire y
la luz”.
Monet.
Son obras
que ahora se exhiben en galerías, museos y colecciones privadas de todo el
mundo y que permiten disfrutar del campo y su luz como si estuviera
esparcido por cada rincón. Y claramente vemos una finalidad, trasladarnos a ese
lugar en ese mismo instante a través de su luz.
Monet
llegó a afirmar: “Quiero lo inalcanzable. Otros artistas pintan un
puente, una casa, un barco, y eso es el fin. Están acabados. Yo quiero
pintar el aire que rodea el puente, la casa, el barco, la belleza del
aire en el que estos objetos están inmersos, y eso es prácticamente imposible”.
SERIE LOS ALMIARES:
Otro motivo pintado en series fue la famosa catedral de Rouen:
La
representación de un mismo motivo pictórico en distintos momentos para observar
los cambios causados por la luz natural no era nueva para Monet, que ya entre
1890 y 1891 había llevado a cabo una serie de lienzos representando los
almiares.
La
Catedral de Rouen llevada a cabo por Claude Monet entre 1892 y 1894. La serie -consistente
en 31 lienzos que muestran la fachada de la catedral gótica de Rouen bajo
distintas condiciones de luz y clima- provocó una admiración inmediata entre la
crítica de su tiempo, y fue alabada por muchos maestros posteriores, desde
Wassily Kandinsky hasta Roy Liechtenstein.
Pero con
las Catedrales Monet va más allá: no se trata, como ocurría en
los almiares, de representar un modelo tangible (los montones
de paja) bajo distintas condiciones lumínicas y climáticas. En los lienzos
de La Catedral de Rouen , el auténtico objeto no es ya el
modelo arquitectónico, al que Monet en cierto sentido "desprecia" al
representarlo desde un punto de vista cercano en exceso, de tal forma que la
arquitectura, debido a la casi ausencia de perspectiva, pierde su grandiosidad
y queda incluso seccionada en las torres y pináculos: el edificio no es más que
un fondo, una excusa , para mostrar al auténtico protagonista
de la composición: la capacidad de la pintura de representar la cualidad
dinámica de la luz y el ambiente, que es capaz de dar vida a
algo tan inanimado como la imponente fachada de la catedral.
Incapaz
de representar en un lienzo completo cada fugaz instante, Monet trabajaba
en ocasiones simultáneamente con varios lienzos, volcándose en uno en concreto
cada vez que las condiciones de luz y ambiente se parecían a la del cuadro en
cuestión. Imaginemos por un instante la situación: Claude Monet, instalado
frente a la ventana de un segundo piso frente a la Catedral , trabajando
frenéticamente con decenas de lienzos, a merced de que una nube pasajera, un
fugaz rayo de sol, una niebla matinal le obligara a buscar -si es que existía-
el cuadro en el que pudiera centrarse. Por supuesto, tal tarea debía resultar
desesperante, y el propio pintor está a punto de abandonar su empresa. Pero no
era Monet una persona que se rindiera fácilmente: " Más que nunca
aborrezco las cosas que salen bien al primer intento”, había escrito
mientras trabajaba con su serie de los almiares. Monet llega
incluso a concluir varios de los lienzos en su taller, fiándose de su
portentosa memoria visual. Pero dos años después, la misión estaba cumplida, y
Monet poseía ya tres decenas de capturas pictóricas de la
Catedral. Así, y por primera vez en la historia de la pintura, se había logrado
representar la cuarta dimensión, el tiempo, un logro
reivindicado -sin embargo- por numerosas vanguardias varias décadas posteriores
al maestro francés.
Evidentemente,
entre los 31 lienzos hay más diferencias que las debidas a las distintas
condiciones de luz y ambiente. Monet eligió en total cinco puntos de vista
diferentes pero siempre conservando ese punto de vista cercano. 25 de estas
vistas están fechadas en 1894, otra lo está en 1893, y las cinco restantes no
están fechadas, aunque sí firmadas. No obstante, el hecho de que Monet
concluyese la mayoría de vistas en su taller resta importancia a las fechas, ya
que resulta más importante la fecha en la que cada lienzo fue iniciado. La
elección de la paleta refleja los distintos tonos con los que la luz del día
iba tiñendo la fachada de la catedral: de unos suaves azules para los lienzos
creados por la mañana se pasa a unos vivos tonos ocres y dorados para los
cuadros "a pleno sol”y castaños y grises para los días
nublados.
Las Catedrales de
Monet gozaron de una aceptación inmediata entre la crítica y el público. “Monet hace
que hasta las piedras cobren vida”, declara el escritor Georges
Clemenceau.
La
Catedral de Claude
Monet es, además de objetos codiciados por cualquier Museo o coleccionista, el
mejor testimonio pictórico de la audacia del impresionismo.
PUNTILLISMO:
En el
mismo siglo, se encuentra además de Monet y otros tantos, el líder del
neo-impresionismo, Georges Pierre Seurat(París, 2 de
diciembre de 1859 – 28 de marzo de 1891) Algunas
de sus obras neo impresionistas fueron iconos del siglo XIX,
luego pinta la obra un domingo de verano en la Grande Jatte (1884-1886),
la cual le lleva dos años de completar y luego expone, es con esta obra donde
nace el puntillismo o técnica de la mezcla óptica de los colores.
El
puntillismo es una técnica pictórica que consiste en la aplicación sistemática
de puntos de diferentes colores, y que parte de las teorías científicas de la
"división del color", según las cuales, la luz blanca está formada
por los distintos colores (del arco iris).
Características
del estilo:
1. En el
puntillismo la imagen va a adquirir una identidad desconocida.
3. Vuelve
a cobrar importancia el dibujo, que se había abandonado a favor de las manchas
de color. 4. La obra se comienza al aire libre, pero a diferencia del
impresionismo se termina en el taller, ya que sus cuadros requieren una larga
elaboración, en ocasiones muy compleja, que no se puede hace en un momento.
5. Se
preocupan por el volumen.
6. Las
figuras se hacen geométricas.
8. La
obra resultante suele pecar de rigidez y artificialidad.
9. Con
respecto a los colores no se mezclan ni en la paleta ni en el cuadro, sino que
sus pinceladas se redondearon y redujeron a puntos de color puro, se fragmento
la línea.
10. Sólo
usan los colores primarios y el ojo debe hacer la mezcla. Existe la sensación
de que la luz emana de los cuerpos.
13. Los
cuadros puntillistas son un modelo de orden, claridad y planificación
cuidadosa. No obstante, las personas aparecen estáticas e inmóviles.
14. Los
temas elegidos a la hora de pintar eran: puertos, orillas de ríos y escenas
circenses.
El
puntillismo fue contrario al efecto borroso de las pinturas impresionistas,
realizadas con pinceladas irregulares, su técnica es más científica, en
el que las formas sólidas se construyen a partir de la aplicación de muchos
pequeños puntos de colores puros sobre un fondo blanco. Seurat fue el fundador
de la teoría del divisionismo, para la cual aprovecha los postulados impresionistas,
depurándolos y extremando el rigor científico.
Seurat y
el puntillismo se relaciona con la teoría de Isaac Newton, donde descompone la
luz (blanca) con un prisma haciéndola pasar a través de él, los rayos de luces
van a distintas velocidades y direcciones logrando como resultado direcciones y
componentes distintos a la inicial apareciendo así los diferentes colores; es
ahí donde se ven relacionados ya que ellos confeccionaron un disco donde reunía
todos los colores como el de la teoría, en el cual se unían unos a otros
mediante colores intermedios, además en su paleta utilizaban el color blanco
mezclado con los primarios y de ello obtenían una multitud de tonos hasta un
blanco casi puro. Podemos relacionar el color blanco como la luz utilizada en el
prisma ya que era descompuesto al mezclarlo con otros colores y se generaban
varios matices y tonos. Seurat estudió la teoría científica de la visión
cromática lo que inspiró al mismo a la busca metódica de los puntillistas, en
sus cuadros se ven colores puros minúsculos, ya que él creía que se mezclaban
en el ojo del espectador, pero sin perder la intensidad y luminosidad. Las
teorías de los puntillistas era basada en cómo tenían que situarse los pequeños
puntos de color para crear los distintos matices se basaban en los más
recientes descubrimientos acerca de la luz y la visión. La teoría de la
descomposición de la luz se puede ver reflejada en una burbuja de jabón, en una
mancha de aceite sobre el asfalto, o cuando un rayo luminoso incide sobre un CD.
OBRAS:
George Seurat"La Parade" 1889
George Seurat. "El Sena y la Grande Jatte en primavera" 1888.
LA LUZ
ARTIFICIAL Y LAS ARTES LUMÍNICAS Y CINÉTICAS:
En las
primeras décadas del siglo XX, gracias al empleo de nuevas tecnologías, se
produjeron en Europa movimientos artísticos: Vanguardismo (incorporan la Luz,
actuando sobre la percepción del espectador), donde se extendieron al resto de
los continentes, principalmente hacia América.
La
principal característica del vanguardismo es la libertad de expresión, que se
manifiesta alterando la estructura de las obras y desordenando los
parámetros creativos; en arquitectura se desecha la simetría, para dar
paso a la asimetría; en pintura se rompe con las líneas, las formas, los
colores neutros y la perspectiva.
Arte
Cinético
Sus
primeras manifestaciones fueron en 1920 . Los artistas vanguardistas y
contemporáneos trabajan con la luz artificial en las artes cinéticas
organizando estructuras complejas y se vuelve un observador sensible de su
ambiente, en estas obras la intensión del artista es “superar la
abstracción y estética”, que permite que el espectador se vuelva activo y
creativo.
Esta
actividad del artista se da principalmente en el campo de la escultura,
donde Intervienen objetos que crean un movimiento óptico de formas y
colores en función del visitante; introducción de máquinas, artefactos
magnéticos y eléctricos, objetos que se mueven por corrientes de aire, etc.,
accionadas por un motor eléctrico, o activadas por poleas, palancas,
etc. El arte cinético se puede basar en las ilusiones ópticas, en la
vibración retinaría y en la imposibilidad de nuestro ojo de mirar
simultáneamente dos superficies coloreadas, contrastadas.
La luz
puede acompañar a movimientos espaciales o actuar aisladamente de un modo no -
espacial, pero siempre es el elemento activo de todo posible movimiento. De
este modo se transforma en primordial ya que el luminismo se caracteriza por el
cambio de color, de la luminosidad, de la trama, etc.
Las
experiencias con la luz y el movimiento se relacionan directamente con la idea
de alejarse de la obra fija, estable y definitiva. El espectador se encuentra
rodeado o delante del desarrollo de una multitud de cambios, de los
elementos y formas, sin distraer las evidencias que nos ofrecen
mediante sus intervenciones lumínicas, una visualización de lo sensible en
evolución, modulando el espacio y su percepción.
El Arte Lumínico
Sus
primeras manifestaciones fueron en 1940, por el artista argentino Julio Le Parc
y otros. Trabajan con la luz artificial interviniendo en el espacio público,
debe pretender conseguir no solo un lugar de paseo que los visitantes
puedan cruzarlo sino también un lugar de experiencia, de participación, de
intervención por parte del lector-visitante.
La
Luz interviene en el espacio construido que trabajan sobre la
percepción de lo construido, ofreciendo una visualización cambiante y dinámica
que desmaterialice la rigidez arquitectónica para convertirla en un agente
activo de la configuración espacial; una arquitectura informe, líquida,
que moldea su apariencia en función del ritmo del contexto histórico, ambiental
o social donde se ubican.
Las
representaciones reactivas del artificio arquitectónico, son las
intervenciones lumínicas en el espacio público, que dan lugar a espacios
híbridos, con una percepción modulada por el dispositivo de iluminación.
El
dispositivo de luz se actualiza en función de unos datos obtenidos del entorno
donde nos ubicamos, ya sea físico, ambiental o virtual. Se trata pues de
dispositivos de iluminación que reaccionan en tiempo real a determinados
cambios que se producen alrededor de ellos, ofreciendo una visualización de una
información no visible. En este sentido, podríamos hablar de percepción
aumentada, ya que la percepción del espacio nos ofrece más datos que no
podríamos ver sin la instalación del dispositivo.
Artistas que trabajan con la luz como elemento configurante de su obra:
Arte
Lumínico:
László
Moholy Nagy(1895- 1946) fue considerado el
“padre” de esta corriente. Se destacó en el uso de luces en esculturas y
móviles.
Dan
Favin:Las nuevas tecnologías
industriales le permitieron al artista incorporar y cambiar las luces
incandescentes por fluorescentes, creando así esculturas de luz,
transformando la atmósfera en las que fuesen instaladas, dándole vida y
un nuevo uso a un objeto cotidiano. Los colores base en el trabajo fueron:
rosa, azul, rojo y amarillo. La mezcla de estos colores permitía crear efectos
ópticos que enfatizaron los estados de ánimo reflejados en el diseño de la
iluminación.
Dan Flavin"illuminazione".1996.
Dan Flavin"untitled"1987.
Dan Flavin"Wissenschaftspark" 2004.
Arte Cinético
Gianni
Colombo:Estrella de renombre internacional del
“Arte Cinético” o programado. Experimentó con nuevas estructuras de la
percepción a través de los juegos de luz, creando obras utilizando proyecciones
de luz de espejos colocados en la vibración, formas y movimientos virtuales
aparentes, con estructuras en movimiento rápido, imágenes producidas por
el flash rítmica, trabajó en el movimiento para la intervención del
espectador o animación, los ambientes que involucran el comportamiento
del espectador y su impacto en la postura.
Gianni Colombo"espacio elástico".1977
Gianni Colombo"Espacio elástico" 1967/68.
Julio Le
Parc: Es
uno de los nombres clave del arte contemporáneo y uno de los pioneros del arte
cinético. Uno de los artistas argentinos más importantes del siglo XX.
¿Quién ES
Y COMO TRABAJA CON LA LUZ JULIO LE PARC?
Julio Le
Parc Escultor
- Pintor argentino
Nacido en
1928. En el año 1942 se mudó junto a su familia a la ciudad de
Buenos Aires; en 1943 ingresó a la Escuela Nacional de Bellas
Artes Prilidiano Pueyrredón, aunque lo abandono al año siguiente.
Restableció
sus estudios de bellas artes recién en 1955.
En 1957 se
inicia en la realización de una pintura abstractizante.
En 1958 es becado por el gobierno francés y se instala
en París, donde en 1960 fundó el GRAV (grupo
de investigaciones de artes visuales).
En 1966 realizó
su primera exposición privada en la galería de arte Sage de
Howard (Nueva York) pocos meses después, en el mismo año, obtuvo el primer
premio de la Bienal de Venecia.
La obra
de Le Parc fue para su momento aún vanguardista, innovadora, audaz;
en ella se utilizan como elementos de la plástica, principalmente aquellos que
sorprenden o que sugestionan a la mirada -y, a través de ella, al sujeto todo-.
Por otra
parte, Le Parc busca involucrar absolutamente al espectador dentro de la obra;
para ello recurre a iluminaciones artificiales, efectos especulares, reflejos y
movimientos.
Las obras de Julio Le Parc complementando la luz:
Las obras
de Julio Le Parc sorprenden por su extraordinaria imaginación y la riqueza de
medios que propone en cada una de sus instalaciones. Pero también hay en ellas
un indiscutible sentido estético y un humor muy presentes.
Los materiales que emplea en sus creaciones varían de una a otra. Por ejemplo,
se encuentran repetidamente en su composición finas láminas de metal, de
plexiglás, de cristal, de plástico, cintas de papel o espejos, para reflejar al
infinito un universo en perpetuo movimiento.
El mundo
que presenta este artista escapa de cualquier interpretación específica, puesto
que todo cambia con la luz y fluye con el movimiento.
El grupo se transformó con el tiempo en el llamado "Arte
Lumino-Cinético", que se servía principalmente de la luz y del movimiento
en sus creaciones. Esto provocaba la modificación constante de la obra de arte
y, por consecuencia, ésta perdía su carácter fundamental de estabilidad y permanencia.
Por otro lado, con este nuevo modo de percibir la obra artística, en vez de
recibir la luz desde un punto del exterior, podía convertirse también en un
cuerpo que emitía luces.
Los
primeros experimentos con la luz se dieron en 1959. Ellos utilizaban la luz en
pequeñas cajas, intentando multiplicar, copiar y combinar, utilizando
compuestos con formas de prismas, círculos, y utilizando catorce colores.
Numerosos
experimentos se llevaron a cabo, derivado de la manipulación de materiales.
En 1962 hice
otro experimento, utilizando un haz de luz artificial. Uno de ellos sirve para
proyectar un haz de luz sobre un cilindro que refleja el haz, y así se
distorsionara. Este rayo es entonces recibido por los componentes que dividen
las diferentes maneras. El efecto visual que se percibe en el círculo blanco,
es un juego constante de la LUZ y la SOMBRA.
OBRAS:
"Le Parc Lumiere" muestra de arte década de los 60
LUZ
PULSANTE:
En 1964
es la fuente de otra serie de experimentos. Se trata de un disco de aluminio
pulido, de 60 cm de diámetro que gira rápidamente sobre un eje, sobre la que se
proyecta una luz, esto produce dos fenómenos, Uno, las imágenes son devueltas
por el "espejo" de la placa en movimiento,
Y segundo, la luz se
proyecta desde la placa en forma rápida y sucesivamente iluminando los objetos,
que produce un movimiento, una vibración debido al rápido movimiento de la luz
y la sombra.